México pierde si no tiene tecnología propia

NFT. 24 de septiembre del 2002


Computadora del curso fase I y programador de GAL
No tienes que comprar un instrumento caro para programar, verificar y asegurar un GAL (Generic Array Logic), la computadora del curso fase I y su software envían las claves para fabricar tus propios chips en casa. De máxima utilidad en laboratorios, escuelas, universidades, etc. Otro diseño original de la familia Toledo.

A pesar de sus valiosos recursos naturales y el esfuerzo de sus ciudadanos, los gobiernos de América Latina no han sido capaces de alcanzar objetivos sociales, cada nación es relativamente independiente y no tiene que responden a los designios de ninguna autoridad superior, aunque el sistema de naciones es intrinsecamente anárquico. Hay una llave para alcanzar la ansiada autonomía, es el avance y el progreso de las nuevas tecnologías que están intimamente relacionados con la prosperidad del estado. Aquí la ciencia y la tecnología son el ente inmaterial que muchas veces es desdeñado por ignorancia, por ser un objetivo a largo plazo creen que es ajeno a su progreso y lo vislumbran demasiado lejos, ponderan con desafortunada insistencia en la naturaleza exógena de la actividad tecnológica con la económica, a pesar de que están dominados por una deuda que luce impagable, privada y poderosa, de la cual dependen en un grado jamás visto, para estar sometidos a su arbitrio, como resultado de un modelo económico que ha hundido a los países en la miseria, la inercia y el letargo.

Hoy «despiertan» de su indolencia para una «modernización», donde desperdician millones de dólares en objetivos secundarios para comprar computadoras desechables, con un gasto mínimo en investigación básica, que ligada al progreso del país refleja esta realidad: El promedio mundial de inversión en tecnología es de 2.3% del Producto Interno Bruto (PIB), solo Brasil se le acerca en 2.13%. Colombia, Chile y Venezuela gastan solo 1.61, 1.54 y 1.21% de sus respectivos productos internos, Argentina y México están relegados a 1.03 y 0.99% del PIB.

De estos tiempos de corrupción, incapacidad e impunidad de funcionarios que han saboteado las instituciones democráticas de América Latina, surge la rompedora tecnología desarrollada por una familia, mientras que los equipos informáticos a los que estamos acostumbrados se producen en grandes compañías, con plantillas de ingenieros doctorados en las más prestigiosas instituciones, Oscar Toledo Esteva y su familia trabajan discretamente y por cuenta propia, con un incansable espíritu de superación. No fueron arrastrados al siglo XXI como la mayoría, entraron con naturalidad en esta nueva era sin traumatismos de adaptación, con la creencia bien fundada en realidades, por haber diseñado un sistema entero desde los cimientos, han generado nuevos conocimientos, innovaciones y propiedad intelectual, son únicos al crear y construir el hardware, el firmware y el software para computadoras evolutivas, como: El sistema operativo gráfico Fénix, el Navegador Biyubi que cambia la manera como vemos y manejamos Internet, con software integrado enteramente en una nueva plataforma de computadoras con una ruta diferente, convergencia de diez generaciones de computadoras con microprocesadores distintos, diseñadas en un lapso de 50 años, hasta llegar a la competitiva undécima generación de computadoras, con un acercamiento ergonómico, preciso, útil, y cuyo manejo es de una facilidad incomparable.

Las computadoras de la Familia Toledo aun siendo prototipos son revolucionarias y provocativas en su diseño y manejo, pueden adoptar cualquier forma estética deseada para su presentación final al usuario. Creadas por una familia mexicana en su departamento de investigación científica, antes que muchas trasnacionales que deben su opulenta economía a la venta de computadoras, que no crean innovadores, solo usuarios, se han vuelto tan ubicuas que ya no despiertan demasiada atención, sin embargo, existen diferencias notables entre estas máquinas y la plataforma evolutiva Familia Toledo.

Solo manejando su computadora de última generación con su eficiente sistema operativo, se palpa su poder estratégico que da fuerza para enfrentar grandes retos, capaz de convertir a nuestro país en una potencia mundial que no se quede estancada consumiendo o maquilando productos foráneos. Es una fantasía creer que al importar e instalar fabricas de nuevas y cambiantes tecnologías todos podrán beneficiarse.

La Familia Toledo trabaja y busca la realidad para vivir en ella, demostrando que es más efervescente e interesante que la ilusión sin sentido, preparan y fomentan el camino de una tecnología humanística, dejando en el olvido las computadoras desechables, pero la capacidad para determinar quien gana y quien pierde ¡sigue con nosotros! En este consumidor esfuerzo aplican desde el bulbo termoiónico, el transistor, el circuito integrado y microprocesadores de vanguardia en las ciencias, en un desafío de talento y perseverancia, logrando portentos tecnológicos sin apoyo, y no les pesa invertir su patrimonio familiar con tal de crear herramientas poderosas que hombre alguno ha tenido, derivando más tecnología que las máquinas comerciales para diseñar nuevas generaciones de computadoras de altas prestaciones. Ellos continuan ganando credibilidad con espíritu triunfador para recordarnos la esencia misma de nuestra existencia humana, son los héroes de nuestro tiempo, sus armas no son la fuerza bruta y el temor, sino la razón y los nuevos conocimientos, el enemigo no es el ser humano, sino la ignorancia, cuando ellos ganan, gana el mundo entero. Son hacedores que poseen las ideas y los recursos tecnológicos para hacerlas realidad, demostrando al mundo que un hombre y su familia pueden hacer la diferencia.

 

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